¿Cómo elegir la cunita?

Cuando fue a por la cunita de mi peque en las tiendas de puericultura no me creía en los precios que cobraban - la más baratita unos 200 euros. Hasta que me fue a Ikea y me llevé toda contenta la cunita Hensvik al lado por € 89.90. En PréNatal habia una sencillita muy similar a esta de Ikea, por €190.

Y claro, ya sabéis que cuando se va a Ikea siempre se lleva algo más. Me acabé llevando dos juegos de funda nórdica, la rojita por € 11.95 y la otra por € 9.99-. ¿A que son preciosas?

Bueno, hay que decir que había buscado antes algunos consejos a la hora de comprarlo, pues los conseguí en la Guia de Compras Mi Bebe y Yo 2007-2008:

• Es conveniente informarse sobre los materiales con los que la cuna está fabricada. Lo barrices y las pinturas deben ser atóxicos.
• En las cunas con barandilla, la distancia entre los barrotes ha de estar comprendida entre los 4,5 y los 6,5 cm.
• Algunas cunas disponen de barandillas móviles, regulables en varias posiciones, que permiten poder coger al bebé más facilmente (bueno, en la mía no hay). En este caso, es importante que lleven un doble seguro de cierre con dispositivo de bloqueo.
• La cuna debe ser lo suficiente honda y sus bordes no demasiado bajos (como mínimo, 30 cm).
• El somier ha de ser rígido y no demasiado flexible. Algunas cunitas disponen de un somier regulable a distintas alturas del suelo, para adaptar la cuna a la edad del bebé.
• Las ruedas permiten mover la cuna con facilidad, pero es necesario verificar que al menos dos de ellas lleven freno (en Ikea no encontré a ningun modelo con ruedas).
• Para comprobar su estabilidad, se deben apoyar las manos en los lados de la cuna y sacudir ligeramente; las oscilaciones deben ser mínimas.
• Atención a los acabados: no debe haber rebabas en las partes de metal o de plástico, o astillas en las de madera. Los tornillos de fijación deben estar encajados o pullidos.

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Sobre los moisés/minicunas no me interesaron en absoluto, pero son recomendables para los primeros seis meses del bebé porque dicen las revistas que el niño se siente recogido. Pero ¿no se puede crear la misma sensación al tener a la cuna cerca de la cama, bien arropadito?

Luego hay las cunas evolutivas, a las cuales se puede conservar hasta después que el niño esté grandote, pero eso sí, son una pasta: una de Leander salía por € 700 pico, había una más baratita por € 235, de Baby Dan. A mí personalmente me hace más ilusión comprar una camita más lúdica cuando el niño esté mayorcito, de esas que parecen a una casita o algo así.